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LA SITUACIÓN FINANCIERA de Petróleos Mexicanos (Pemex) continúa siendo un tema de preocupación entre especialistas y público en general.
Al cierre de mayo de 2024, la deuda de la petrolera dirigida por Octavio Romero con proveedores y contratistas se situó en 133 mil 901 millones de pesos, lo que representa un incremento anual del 71% en comparación con los 78 mil 274 millones de pesos pendientes al cierre de 2023.
Este incremento significativo en la deuda de la empresa productiva del Estado plantea serios retos para la administración actual y futura.
En un intento por manejar su situación financiera, Pemex ha reducido su deuda con proveedores en los últimos dos meses, pasando de 148 mil 281 millones de pesos en abril de 2024 a 133 mil 901 millones en mayo.
Aunque esta reducción de 14 mil 381 millones de pesos o 9.7% puede parecer un avance positivo, es importante destacar que sigue estando entre los niveles más altos reportados históricamente.
Además, esta disminución mensual está por debajo de las expectativas prometidas por Romero Oropeza, quien había asegurado que se realizarían pagos por 70 mil millones de pesos a los proveedores entre mayo y agosto.
El director de Pemex, ha enfatizado en diversas ocasiones que la empresa no busca retrasar los pagos a sus contratistas y que su objetivo principal es el cumplimiento de metas a través del cumplimiento de compromisos financieros.
Sin embargo, las cifras actuales reflejan una realidad distinta, donde las promesas de pagos y la realidad financiera parecen estar desalineadas.
Por su parte, el Secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, ha reconocido públicamente que la deuda de Pemex es un problema significativo que no puede ser ignorado.
Según sus declaraciones, la reestructuración y optimización de las finanzas de Pemex es un proceso que tomará años, subrayando la magnitud del desafío que enfrenta la empresa.
El problema de la deuda de Pemex no es solo una cuestión de números en un balance financiero; tiene implicaciones más amplias para la economía mexicana y la confianza de los inversionistas.
La deuda total de Pemex, que ascendía a 101 mil 500 millones de dólares al cierre de marzo, genera dudas e incertidumbre sobre la sostenibilidad financiera de la empresa a largo plazo.
LA ENTRADA DE vehículos usados desde Estados Unidos a México, mejor conocidos como “autos chocolate”, ha crecido un 52.7% en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador comparado con la administración anterior. A pesar de los esfuerzos por regularizar estos autos, el programa ha sido calificado como un fracaso por especialistas, señalando riesgos ambientales y económicos. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA), presidida por Guillermo Rosales, entre 2019 y 2024, más de 2.5 millones de unidades usadas han ingresado al país. Este incremento no solo afecta al mercado automotriz interno, sino que también posiciona al actual sexenio como el segundo con mayor volumen de regularización de vehículos usados, solo superado por el gobierno de Felipe Calderón.
LA ADQUISICIÓN DE la agencia mexicana Gluo por parte de Orium que dirige Jason Cottrell, una plataforma canadiense de composable commerce, es un paso estratégico en la expansión de Orium en América Latina. Gluo, con experiencia en aplicaciones de comercio electrónico y una relación establecida con Orium, fortalecerá la capacidad de la empresa para atender el mercado estadounidense. Ambas empresas comparten una visión centrada en la eficiencia y escalabilidad tecnológica. Esta adquisición subraya la importancia del creciente mercado mexicano de e-commerce, valorado en más de 48 mil millones de dólares en 2021.
EL INSTITUTO MEXICANO de Ejecutivos de Finanzas levantó la voz por la incertidumbre generada por las reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador y la virtual mandataria electa, Claudia Sheinbaum, que ha frenado la inversión privada. Especial preocupación ha causado la reforma judicial, que podría afectar el clima de negocios y el estado de derecho. Los mercados financieros han mostrado volatilidad ante estas expectativas. El IMEF enfatizó la necesidad de certeza jurídica para atraer inversiones, y han ajustado a la baja su previsión de crecimiento para 2024, de 2.2% a 2.1%, debido a este y otros factores económicos.
VÍCTOR VILLALOBOS Y su gente en la Secretaría de Agricultura deberían de estar preocupados pues el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, anunció la suspensión de las inspecciones de aguacates y mangos en Michoacán por parte del Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal (APHIS) tras una agresión a dos de sus empleados. Los inspectores fueron detenidos temporalmente durante su labor y luego liberados. Salazar ha pedido a las autoridades mexicanas garantizar la seguridad del personal estadounidense. Esta situación podría impactar las exportaciones de aguacates y mangos de Michoacán.
Darío Celis
