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El ex presidente Donald Trump, considerado un paria político tras perder la presidencia en 2020 y el ataque de sus seguidores al Capitolio de EE.UU., fue elegido para otro mandato el miércoles en una victoria decisiva y asombrosa sobre la vicepresidenta Kamala Harris. Su triunfo completa uno de los regresos más notables en la historia política, solo cuatro años después de que los votantes lo expulsaran del cargo.
Una Victoria Histórica
Trump derrotó a Harris al capturar al menos 270 de los votos electorales necesarios para ganar la presidencia. Su conteo podría aumentar a medida que se cuenten más votos. El ex presidente capturó estados clave que durante semanas se consideraron inciertos. La carrera fue tanto improbable como histórica. Su regreso a la Casa Blanca se produce después de haber sido impugnado dos veces, sobrevivir a dos intentos de asesinato y ser condenado por 34 cargos de delitos graves.
Un Regreso Inédito
Trump se convierte en el primer presidente desde Grover Cleveland hace 132 años en perder el cargo y ganar nuevamente cuatro años después. Su triunfo en las urnas fue un momento notable en una contienda presidencial sin precedentes.
Planificación de un Regreso
Impulsado al casi exilio tras la violencia del 6 de enero de 2021, Trump rápidamente comenzó a planificar un regreso desde su base en la finca Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida. Anunció su candidatura para 2024 en noviembre de 2022, poco después de las elecciones al Congreso en las que los candidatos republicanos obtuvieron peores resultados de lo esperado.
Un Cambio de Rumbo
La victoria de Trump sobre Harris pone a la nación en un curso muy diferente al trazado en los últimos cuatro años por el presidente Joe Biden, un demócrata que venció a Trump en 2020 en una carrera cerrada que Trump aún afirma falsamente haber ganado. Harris sirvió como vicepresidenta de Biden. Durante la campaña, Trump buscó vincularla a lo que él consideraba fracasos de la administración en la economía, inmigración y otros temas.
Promesas de un Segundo Mandato
Trump prometió que, si se le daba otro mandato, comenzaría la deportación masiva de inmigrantes indocumentados, buscaría represalias contra sus enemigos políticos percibidos, enviaría al ejército a Chicago y otras ciudades que enfrentan violencia, e impondría aranceles de hasta el 10% en la mayoría de los bienes extranjeros.
“¡Miren lo que pasó, ¿es esto una locura?!” Trump dijo a una multitud de seguidores en el Centro de Convenciones del Condado de Palm Beach temprano el miércoles por la mañana.
Un Mandato Poderoso
Repitiendo comentarios que hizo en la campaña, Trump llamó a sus seguidores “el mayor movimiento político de todos los tiempos” y dijo que su victoria y las victorias del Partido Republicano en el Congreso habían proporcionado “un mandato poderoso y sin precedentes”. Prometió ayudar al país a sanar después de las divisivas elecciones, enfatizando que “tenemos que poner a nuestro país primero al menos por un período de tiempo”.
“Tenemos que arreglarlo”, añadió.
Con información de Agencias